sábado, 13 de noviembre de 2010

Epidemia de fiebre nipona

Cultura
El II Salón del Manga de Murcia acerca la cultura japonesa a 25.000 personas de la manera más lúdica
13.11.10 - 01:58 - PEPA GARCÍA pegarcia@laverdad.es MURCIA.
PARA NO PERDERSE HOY (PROGRAMA)
En la carpa:
Concurso de karaoke (11 h.), de parapara (13 h.) y cosplay (16 h.); desfile de Star Wars (19 h.); y concierto de Silent Orchestra (20.30 h.).
Sótano:
Taller de origami, pintura de muñecas Kokeshi y pixel art (10.30 h.); shodo, muñecas kokeshi y papercraft (12.30 h.); flores de tela (15.30 h.); y abalorios y kokeshi (17 h.). En la sala de proyecciones, maratón de Evangelión (10.30 y 12.30 h.). Además de las charlas de nacho Fernández (16 h.), Diego Gisbert (17.30 h.) y Jesulink (19 h.).
Primera planta:
Aikido, japonés básico y torneos de videojuegos (10.30 h.); kendo (12 h.), curso Manga Shakespeare (13 h.); ninja (13.30 h.); meditación (16 h.); karate (17 h.); y judo(18.30 h.)

La profesora del taller de shodo da instrucciones. :: NACHO GARCÍA / AGM

«Llevo tres meses a régimen precisamente para poder llevarme ahora un buen montón de chcherías», decía el consejero de Cultura, Pedro Alberto Cruz, con cara de niño travieso al entrar, ayer, a un ya repleto de jóvenes y adolescentes II Salón del Manga Murcia se reManga. «Uno de nuestros proyectos estratégicos y nuestra inversión más rentable», recordó Cruz sobre el salón, que hasta las ocho de la tarde de mañana permanecerá funcionando a toda máquina y en el que esperan recibir «alrededor de 25.000 personas, casi todas ellas jóvenes». Una circunstancia ideal ya que «tenemos que crear nuevos públicos e introducirlos en el mundo de la cultura, y el manga es un fenómeno mayoritario que puede ayudar a lograr ese objetivo. Esto es una fiesta», afirmó Cruz antes de realizar la visita inaugural al salón, acompañado por el director general de Promoción Cultural, Libro, Archivos y Bibliotecas, Francisco Giménez; el director ejecutivo de la Japan Foundation en España, Hiroyuki Ueno; y el director del Centro Cultural Las Claras, Ángel Campos, que acudió en representación de la Fundación Cajamurcia. Una visita que el consejero terminó con un bolsón de golosinas, un envase de ramen para comer en su casa y dos cómic: «Cada uno se compra lo suyo», advirtió por si acaso. Y antes de marcharse, no pudo resitir pasar por el karaoke porque «personalmente es lo que más me interesa. Soy un apasionado del karaoke, lo que pasa es que no sé cantar en japones, que es lo que me retiene, pero en cuanto me sepa una estrofa, me animo», dijo y confesó que «he cantado en plazas muy exigentes».
Y es que pasar por el Salón del Manga no es cosa de frikis, ni sólo una opción que convenza a otakus y cosplayers locos por el manga y el anime. Es una oportunidad para iniciarse en el idioma japones, 'eh!' (sería la transcripción escrita del sí en nipón), a través de los talleres que se imparten; aprender a escribir con pincel algunos de sus ideogramas (en los talleres de shodo); acercarse a aficiones como el pixel art (composición de figuras a base de piezas diminutas que luego se unen con el calor de una plancha); dominar el arte del origami confeccionando árboles de Navidad, globos, gorros o hasta 'papás noeles'; construir todo tipo de estructuras y personajes cortando y pegando papel en los cursos de papercraft; o aportar un artístico granito de arena a la elaboración colectiva de una pintura de las tradicionales y bellas muñecas Kokeshi, en la que también quiso colaborar el consejero.
Murcia se reManga está resultando «muy interesante porque trata toda la cultura general de Japón, una buena oportunidad para presentar el idioma japonés y para que la gente entre en contacto profundo con la cultura japonesa. El año que viene vamos a hacer una presentación de dos proyectos experimentales para aprender japonés a través de dos webs: una de anime y manga, que ya tiene versión en español (http://anime-manga.jp) y otra a través de la historia de una colegiala, Erin (http://erin.ne.jp). Es muy fácil aprender disfrutando», comentó Hiroyuki Ueno, que apoya este salón como medio para conseguir el interés de los jóvenes por todos los aspectos de su cultura.
Y en un evento que tiene el cómic y el cine de animación japonés como baluarte y la cultura nipona en el horizonte, no podían faltar las artes marciales. Talleres y exhibiciones que congregan a un numeroso público alrededor de las figuras más destacadas de cada una de estas especialidades en la Región. Un ejemplo de ello es Carlos Argudo, un ninja en toda regla, cinturón negro 10º DAN, cuya colección de armaduras y armas ninja ha logrado «sorprender» a Ueno, y que posee la medalla de oro de la asociación Bujinkan, que en España tienen «el Rey, la Infanta, un profesor de Canarias y yo, por la labor que estoy desarrollando a nivel de enseñar Bujinkan a la Infantería de Marina y la Policía», cuenta Argudo. Pero además de poder acercarse al mundo de los ninja, los asistentes también pueden adquirir nociones de judo, jujitsu, aikido, kendo o karate. Unas prácticas que conocen con precisión a través de los personajes de sus series favoritas como ocurre con el caso de 'Naruto', explica Argudo, con el ninjitsu.
Tampoco se queda fuera de esta amplia propuesta, mucho mejor organizada y distribuida en los diferentes espacios del anexo del Auditorio que en la primera edición, la moda. Así, a través de Harajuku, Libertad Gómez ha traído desde la tienda Akiba que tiene en Barcelona lo último en moda gal («la propia de la tribu urbana más fashion», aclara Libertad), lolita («una recuperación de la estética de cuando se era niña pero sin dejar de ser adulta», aclara la experta) y visual («una tendencia más urbana y propia de los rockeros japoneses»). Entre las curiosidades que Harajuku presenta llaman la atención las 'lucky bag': una especie de cotillón de Nochevieja surtido a base de vestuario completo de lolita, con zapatos y accesorios para el pelo, que las clientas compran a ciegas por unos 150 euros.
Mención aparte merecen las exposiciones: la del concurso de carteles del salón, la de muñecas blythe, la de gudam (transformers), la de consolas retro, la de ilustrciones de Enkaru, la de reproducciones del videojuego Castlevania, obra de Diego Gisbert o la de fotografías de Japón. La sala de proyecciones también alberga maratones de anime y charlas de conocidos ilustradores (para hoy están previstas las de Nacho Fernández, Diego Gisbert y Jesulink).
En la zona game los visitantes se retan con guitarras, bajos y baterías como armas, y dejan volar su imaginación protagonizando las historias de videojuego, mientras Joso realiza sin descanso sus caricaturas al minuto al lado de cientos de jóvenes que dibujan aspirando a llevarse el premio de un curso de verano en la Escolajoso. En la misma planta, las maquilladoras de Nefer Center completan los vestuarios de los cosplayers y el stand de Asmodee Ibérica invita a los participantes a aprender a jugar al Jungle Speed o al Perudo.
Sin duda, «esto es una fiesta que da a la cultura una dimensión social», como afirma Cruz, además, muy bien organizada. Si tiene alguna duda y tiempo de ocio... Pásese, se arrepentirá de no hacerlo.

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